martes, 26 de diciembre de 2017

Paisaje Industrial

        "...Exalte a Sorrento y a Crimea
quien se perece por la belleza
pero yo soy de Lodz 
y el humo negro me es dulce y agradable."
Tuwim

    Hace ahora un año, más o menos, mi amigo Juanjo y yo quedamos una mañana para hacer un recorrido fotográfico por la Zaragoza industrial de la margen izquierda del Ebro, queríamos tener material gráfico para luego a partir de esos materiales poder pintar. 
     Nuestro primer objetivo fue la fábrica la Montañanesa y el río Gállego, después aprovechando la madrugada hicimos otras fotografías como la que me ha servido para a partir de ella realizar esta acuarela. Era justo después del amanecer y hacía un frío de cuidado, íbamos pertrechados con gorros de lana y nuestras cámaras Nikon, nunca nos han gustado los cánones o normas, al hombro. Fue productiva la excursión aunque daba pereza levantarse con ese frío y a esas horas. Como puede verse en la acuarela, el aire era frío, denso y pesado por eso al humo le costaba desvanecerse perezosamente en el cielo.

Zaragoza. Paisaje industrial desde el puente de Alcalde Caballero. Acuarela de 36 x 48 cms sobre papel Hahnemuhle.

     No es la primera vez que pinto un paisaje industrial pues me siento también atraído por su compleja y decadente belleza. No será de extrañar que en un futuro más o menos cercano pinte La Montañanesa con lo que aquella excursión habrá sido totalmente productiva.

sábado, 23 de diciembre de 2017

Pulsiones de okupa.



  

Torreón y Palacio de Biota. Acuarela de 36 x 51 cms.
     Me gusta regalar acuarelas, a los incautos que no se aperciben del peligro, y ellos para no quedar mal conmigo, no tienen otro remedio que enmarcarlas y ponerlas en sus casas. Ahí ya conseguí la victoria, conseguí entrar en esos espacios cerrados, ajenos, donde hasta el aire está inventariado. Poco a poco, imperceptiblemente, se trata de ir colonizando la atmósfera de la casa, cambiando la música de las cosas sustituyendo los compases minimalistas y precisos de Satie por la perfección del fraseo y el contrapunto de Bill Evans.

Loughborough Tower Acuarela 36 x 48 cms
    Posteriormente, para comprobar mi logro, visito sus casas, con gran placer siento que sus espacios cotidianos son en gran parte míos, que es mi forma de ver las cosas la que ocupa sus paredes. Ellos no se dan cuenta pero están permitiendo que los okupe.  De momento son nada más que las paredes lo que invado pero con el tiempo ya veremos.

Iglesuela del Cid. Acuarela de 46 x 61 cms.
  


Cantavieja. Acuarela de 36 x 48 cm


   

    De esta manera sibilina, lenta, en la que parece que nada ocurre, sin grandes alharacas, consigo sin embargo mis propósitos. 
    Incluso paso por ser una persona desprendida, generosa cuando es todo lo contrario, no doy sino que me apropio de las cosas.  
     Así de forma inopinada he conseguido invadir espacios incluso de otros países como Francia o Reino Unido. Eso sí que es colonialismo imperialista en toda regla; en nuestro propio territorio comportándome como una mancha de aceite que se extiende lentamente estoy ya presente en poblaciones tan exóticas como lo son Biota, Corralejo, Herreros de Jamuz, Santander o Barcelona. Y amenazo en que la cosa no quede ahí. Ya veremos.
    



domingo, 17 de diciembre de 2017

Zaragoza. Río Gállego con niebla y frío.


"...Pero tú y yo sabemos,
río que bajo mi casa fugitiva deslizas tu vida experta..."
Luis Cernuda, Dans ma péniche

    Segundo ejercicio para clase de Composición. 
  En este caso se trataba de reflejar emociones a través de la composición. Las emociones básicas son seis, según Ekman, pero no en ese orden: alegría, tristeza, asco, sorpresa, miedo y enfado. En mi caso he enfatizado la composición para intentar transmitir tristeza. He utilizado colores fríos, la bruma o niebla a través de la indefinición y la veladura, líneas descendentes en el puente, el río, las orillas...
  Según algunos psicólogos la tristeza es la emoción inspiradora. Genera un estado en el que muchas personas son mucho más creativas, ya sea escribiendo, componiendo, pintando un cuadro o realizando cualquier otra actividad.

Zaragoza, río Gállego con niebla y frío. Acuarela de 51 x 36 cms. sobre papel Hahnemuhle de 280 grs.



martes, 12 de diciembre de 2017

Jóven músico africano.

      ¡Yambambó, yambambé!
Repica el congo solongo,
repica el negro bien negro;
congo solongo del Songo
baila yambó sobre un pie.

Mamatomba,
serembe cuserembá.

El negro canta y se ajuma,
el negro se ajuma y canta,
el negro canta y se va.
Acuememe serembó,

yambó,
aé.

Tamba, tamba, tamba, tamba,
tamba del negro que tumba;
tumba del negro, caramba,
caramba, que el negro tumba:
¡yamba, yambó, yambambé!
Nicolás Guillén

Jóven músico africano. Acuarela de 76 x53 cms. Sobre papel Hahnemuhle de 280 grs.
 

     Me parecía interesante volver sobre la figura humana y este jóven músico me parecía un buen motivo para hacer en acuarela. Como no es de la familia, por mucho que yo lo aprecie, no existe problema con el parecido. No obstante tendréis que pasar por mi palabra si digo, o mejor escribo, que sí se parece mucho al original. Me ha gustado tanto hacer el trabajo como el resultado. Quizás no sea la única acuarela con músicos callejeros como motivo que pinto. 
    La percusión me ha traído inevitablemente el recuerdo de la poesía percusiva de Nicolás Guillén, el poeta negro cubano de Camagüey que utiliza las onomatopeyas como notas percusivas en los poemas creando un gran ritmo musical.


lunes, 27 de noviembre de 2017

Un bodegón

    
                                                   "...Seu cristal simples reprime a forma, no instante
                                                                             incerto:
pronto a cair, pronto a ficar límpido e exacto."
                                                          Cecilia Meireles: Epigrama nº 5
                                                                                       
                                                    Se anuestraría por:


"...Su cristal sencillo contiene la forma, en el instante
incierto:
pronto a caer, pronto a quedarse límpido y exacto."
 Cecilia Meireles: Epigrama nº 5


    Una propuesta, deberes para casa, hacer un bodegón tarea a realizar como práctica de una de las clases de composición a cargo de Juan Baldellou, serán cuatro o cinco clases. Los elementos a emplear eran fijos: un libro, una botella, un libro y un vaso o copa además del soporte, claro está. No era una cosa que yo hubiera previsto pintar pero no deja de ser un buen ejercicio. Me divertí sobre todo con la botella de whisky y con el libro haciendo sus texturas. Aquí el resultado.

Bodegón. Acuarela de 41x31 cms. sobre papel Hahnemuhle de 280 grs.


     
     
     En la siguiente clase, vamos por la segunda, Juan comentó los bodegones que habíamos hecho cada una o cada uno. En mi caso con un dibujo de formas geométricas y volúmenes mostró que la composición no estaba equilibrada, sino que había un vacío a la derecha, además hay que tener en cuenta que visualmente la derecha es más importante en una composición.


  Desequilibra todavía más la composición la zona oscura de sombra de la izquierda, que visualmente pesa mucho  y por lo tanto acentúa la carencia de la parte derecha.
   En fin, ahora ya lo sé para otras veces.

 

sábado, 11 de noviembre de 2017

Zamora, la bien cercada, desde la margen derecha del Duero.

                                                                           " Heme ante tus murallas,
                                                                            fronteriza ciudad a la que siempre
                                                                            el cielo sin cesar desasosiega.
                                                                            (...) Esto no es monumento
                                                                            nacional, sino luz de alta planicie,
                                                                            aire fresco que riega el pulmón árido
                                                                            y lo ensancha, ...."
                                                                            Claudio Rodríguez


    Zamora es una hermosa ciudad, la he visitado ya tres veces y nunca me ha defraudado, antes al contrario cada día me gusta más. Por su tamaño y elegancia es el tipo de ciudad en la que vivir tranquilo. Cuando llegué a ella por primera vez me sorprendió y siempre recomiendo a los amigos pasear tranquilamente por ella, visitar sus comercios, recorrer perezosamente sus calles y sus bares o restaurantes. 
   Sospecho que la luz está enamorada de Zamora y hasta el Duero, prendado de su belleza, lame sus faldas. Dice el romance: "...De un lado la cerca el Duero/ del otro Peña Tejada/ del otro veintiséis cubos/ del otro la barbacana." Las murallas no tienen aspecto amenazador o guerrero sino más bien delimitador del recinto de la ciudad como si en realidad trataran de impedir que se expandiera fuera de sus precisas formas.
   La vista que he pintado a la acuarela es semejante en muchas cosas a la vista de Zaragoza desde la margen, es ese caso, izquierda del Ebro. Deberíamos proteger los ríos porque los urbanitas intentamos apropiarnos de sus riberas. Ya pasó con las orillas del mar y ha habido que legislar sobre ello y protegerlas casi cuando ya no había remedio. En esta acuarela me he recreado de forma especial en los árboles del primer plano y en el dorado Duero.

Zamora desde la margen derecha del Duero. Acuarela de 56 x 76 cms sobre papel Arches de 800 grs.





 

viernes, 6 de octubre de 2017

Biota I

                                                                         "Siempre la claridad viene del cielo;
                                                                          es un don: no se halla entre las cosas
                                                                          sino muy por encima,..."
                                                                          Claudio Rodríguez


    Tenía ganas de visitar Biota, el pueblo de nuestras amigas Belén y Rosa. Han sido varias las veces que íbamos a ir y al final por una u otra causa retrasábamos el viaje. Recientemente por fin fuimos y, a partir de unas fotografías que hicimos, ahora voy pintando acuarelas. 
    En primer lugar he pintado dos vistas generales del pueblo, luego haré alguno de sus edificios y  probablemente una calle. Es placentero ir acariciando el papel con los pinceles y ver surgir poco a poco lentamente el pueblo y sus alrededores. A veces eliminas elementos que no te gustan como las torres de alta tensión, las torres de telefonía móvil o coches y personas. Después casi las echas de menos porque ves el paisaje deshumanizado aunque bien es verdad que sin contaminantes visuales.
   La primera de las vistas de Biota presenta aparentemente un paisaje poco vistoso, sobrio, en tonos ocres y amarillos principalmente con alguna mancha verde, pero es un paisaje ibérico podría ser mesetario perfectamente, es el paisaje de nuestra tierra al final del verano, con la tierra agostada. Me gustan mucho estos paisajes estoy acostumbrado a valorar su austera belleza, debe ser porque mi pueblo también presenta estas mismas características y estoy acostumbrado a ellas. Me impresiona siempre la luz, la claridad, la rotundidad de los colores.

Biota desde el camino del Corral del Lobo. Acuarela sobre papel Arches de 300 grs de 46 x 61 cms.


      Esta segunda vista de Biota está pintada desde Las Ventas, en un pequeño alto, la posición es totalmente la opuesta geográficamente y también en los colores. Aquí predomina el verde de los árboles,  de la ribera del río Arba de Luesia, ya amarilleando en las copas

Como escribía Laura Casielles en Los idiomas comunes:
"si esto es un árbol, 
miremos cómo se abre la copa para que pase el sol"

Biota desde Las Ventas. Acuarela sobre papel de 300grs. Arches de 46 x 61 cms.

    La acuarela siguiente es el Castillo Torreón y Palacio de los Vizcondes de Biota o de los Condes de Aranda. Estos hermosos edificios también se ven en la anterior acuarela, lejanos pero dominando la población desde lo alto. 

    Aunque un sólo edificio no suele ser un buen motivo para una acuarela, pues suele quedar demasiado estático y frontal, la perspectiva lateral y esquinada desde la que lo he pintado le da algo de profundidad y movimiento.

Torreón y Palacio de los Vizcondes de Biota o Condes de Aranda. Acuarela de 36 x 51 cms. sobre papel Arches de 300 grs.


miércoles, 27 de septiembre de 2017

Las calles de mi ciudad

Llora La Seo,
                                                                              ofendida por el sol,
                                                                                                                            lágrimas de sombra.
                                                                             

      Me gusta callejear por mi ciudad, especialmente por la parte antigua, por sus estrechas calles, que en verano saben sortear la luz del sol para conservarse frescas , y en invierno con contínuos quiebros se libran del cierzo. Cuando voy sin prisa, ahora ya la mayoría de las veces, soy como un viejo amante que no se cansa de admirar cada repliegue. 
     Saliendo del Archivo Provincial una mañana quedé sorprendido y admirado del contraluz que ofrecía la torre de La Seo y me prometí a mí mismo pintarla. Este es el resultado.


Calle Dormer mirando la torre de La Seo. Acuarela de 36 x 48 cms. sobre papel Hahnemuhle.

domingo, 3 de septiembre de 2017

Píntala otra vez Sam

 
                            El paisaje que un hombre ve, ojos afuera, acostumbra a ser
                        el reflejo de lo que esconde, ojos adentro.
                                                                               ALBERT SÁNCHEZ PIÑOL

 
   Inevitablemente cuando pintas un paisaje, un bodegón o un retrato y quedas insatisfecho no pasa mucho tiempo sin que vuelvas a enfrentarte con el mismo asunto. Eso me ha pasado ya varias veces: el puente de Fortanete o las lavandas de Aurel en la Provenza. En este blog ya comenté la primera versión del paisaje y el porqué de mi falta de satisfacción con el resultado en la entrada nº 26 del 28 de mayo titulada Pifia de lavanda. Prometía que volvería sobre ella así que sólo ha sido cumplir con lo dicho.

   Abajo el resultado de la segunda vez que acometía la representación de un paisaje que me gusta muchísimo: La Provenza. La luz de la tarde se hace débil y devuelve a los colores su intensidad por eso prefiero, si puedo elegir, fotografiar o pintar con la luz de la tarde.
     No estoy descontento del resultado. 
   Decía mi admirado Wallace Stevens, Adagia 234: The more intensely one feels something that one likes the more one is  willing for it to be what it is. Que nosotros anuestraríamos por  "Cuando más intensamente siente uno algo que le gusta más quiere que sea lo que es."


Campo de Lavanda, tarde de verano, Aurel (Provenza). Segunda Versión. Acuarela de 55x76 cms



   Me dice mi amiga Carmen que ahora hay preciosos campos de lavanda en Brihuega (Guadalajara). Prometo ir a verlos y disfrutarlos, tiene que ser una perfecta combinación la luz y el aire limpio de Castilla con la suave fragancia de la lavanda. Tarea agradable para el próximo verano.

martes, 8 de agosto de 2017

La cosecha de este verano, hasta ahora.

   Este verano hemos estado en Herreros de Jamúz desde los primeros días de Julio hasta el primer domingo de Agosto. Como siempre en los últimos años, hemos gozado de unos días inmejorables, por el día cálidos pero con noches fresquitas, fresquinas dirían allí.
  Vino a pasar con nosotros una semana nuestra cuñada Cecilia y motivados por ello hicimos, también este año, hermosos recorridos por la provincia de León y Zamora. Cada vez me gusta más este paisaje castellano, casi tanto como el de mi amado Maestrazgo.
   Habilitamos un espacio, en la casa antigua, para pintar y resultó agradabilísimo. Una habitación aislada y fresquita. Oí muy buena música mientras pintaba: Cecile McLorin, Barry Harris, Chano Dominguez, María Callas... Así resultaba un refugio atractivo.

Entrada a la guarida
 
Semejante a la celda de un monje.


    En cuanto a las acuarelas, empecé primero por hacer otra versión en más grande 56 x 76 cms. de un paisaje castellano que le gustaba a Avelina y que ya había pintado en formato 41 x 31 cms., se podría decir que era saldar una deuda.

                                                La inmensidad amarilla 
                                                 existe en los campos 
                                                de León y Castilla.



Alrededores de Frómista. Acuarela de 56 x 76 cms sobre papel Arches de 640 grs.


   Luego quise probar y hacer un paisaje africano con figura, lo había visto en un reportaje de viajes del periódico El Mundo y quería ampliar el abanico de mis posibilidades pintando a la acuarela. No me disgusta el resultado.




Niño pastor turkano contempla un atardecer al terminar su jornada. Acuarela de 56 x76 cms sobre papel Arches de 640 grs.


   Mi tercer trabajo, en formato más pequeño, fue el molino restaurado de Palacios de la Valduerna, lo tenía pendiente de las fotografías del año anterior, me atraía especialmente y me apliqué a resolver los problemas que iba planteando. Me parece que el resultado es bastante bueno.



Antiguo molino sobre el río Peces, hoy restaurado, de Palacios de la Valduerna.Acuarela de 31 x41 cms sobre papel Arches de 300 grs.


                                                                               Los árboles con sus hojas
                                                                incendian el cielo,
                                                                               en otoño.   

     La última de las acuarelas pintadas en la guarida del monje es el monasterio de Veruela, seguramente influído por el ambiente monástico de mi "celda", me acordaba de Becquer y sus Leyendas. Disfruté pintándolo. Eché en falta haber llevado grabada alguna de las misas de Palestrina, por ejemplo la Missa Papae Marcelli, para oirla mientras pintaba.Igual hubiese levitado.

Monasterio de Veruela a comienzos del otoño. Acuarela de 46 x 61 cms sobre papel Arches de 300 grs.





 

miércoles, 28 de junio de 2017

Las tres últimas acuarelas antes de las vacaciones.

    Después de mi anterior "naturaleza muerta", el ramo en colores carmín, me apetecía, ya que las flores son especialmente agradecidas, pintar otro ramo en colores totalmente diferentes. También a partir del reportaje de El País Semanal: Más que ramos, frenesí. En este caso la revista fantaseaban con que era un ramo barroco  en tonos que recordaban a Gustav Klint: Retazos Modernistas lo titulaban. Yo simplemente lo llamo Ramo en tonos amarillos y azules. Ha sido muy entretenido y agradable pintarlo. En el futuro quiero pintar plantas y macetas de casa.

Ramo en tonos amarillos y azules. Acuarela sobre papel Hahnemuhle de 36 x48 cms y 280 grs.
     
   Quería jugar en el papel con colores intensos de otoño y a partir de unas fotografías del Maestrazgo pinté hace unos días esta acuarela. Intensa y poco matizada, a veces conviene atreverse y ver qué sale. La hice en un par de sesiones y no me disgusta el resultado.

Otoño en el Maestrazgo. Acuarela de 36 x 51 cms sobre papel Arches de 300 grs.


   También acabo de pintar una vista de la calle principal de Iglesuela del Cid. No es necesario volver a repetir en este blog los motivos de mi especial relación con el Maestrazgo turolense, seguro que volveré a pintar alguna de sus poblaciones o de sus paisajes. Me ha gustado experimentar y gozar con las luces y las sombras de las fachadas de los edificios, no soy Gonzalo Torrente Ballester pero tampoco hace falta.

Iglesuela del Cid. Acuarela sobre papel Arches de 300 grs. y de 46 x 61 cms.



Para mi nieto Martín

   
    No es esta escultura, ni la fotografía, ni tan siquiera la acuarela una composición especialmente estética, pero mi nieto Martín me pidió que la pintara para su habitación y sus deseos son órdenes para mi. Me gusta mucho hacerles caso a mis nietos.
   Se trata de Sockman (el hombre del calcetín) una escultura que hay en una calle de Loughboroug y que a Martín le gusta.

Sockman. Acuarela de 36 x 48 cms sobre papel Hahnemuhle de 280 grs.

domingo, 28 de mayo de 2017

Pifia de lavanda

   Como es natural en todo aprendiz que se precie conjugo algunas veces, más de las que desearía, el verbo pifiar. 
   La última, la acabo de cometer, me ha dolido mucho porque estaba encantado de como me iba apareciendo en el papel una acuarela a partir de una fotografía de los campos de lavanda de Aurel en la Provenza. Por intentar solucionar un problema menor he causado otro mayor, con lo cual deberé repetirla cuando se me pase la frustración que me ha causado.

Así iba la cosa en la Fase 1





Así iba la cosa y yo estaba francamente contento del resultado que iba viendo.

Así quedó en la Fase 2 sin rectificar.
    No me acababan de gustar tres de los caballones y la perspectiva de los del fondo a la izquierda, le di a la esponja para limpiar e intertar rectificar el resultado ha sido peor.
 
Aquí hay saturación de color y no me gusta.

   Ha perdido la transparencia y la viveza de color. No quedará otra que volver a comenzar. En fin el aprendizaje de la decepción es así. Paciencia. Me daré unos días de pausa y recomenzaré la tarea. Por pausa entiendo, eso sí, hacer entre tanto otra u otras acuarelas.

viernes, 26 de mayo de 2017

Caminos de Hierro del Norte

    Así se llamaba la Antigua Estación de Trenes del Arrabal. Vi una fotografía antigua en facebook, creo, y me apeteció hacer una acuarela, este es el resultado. Tenían todas estas estaciones un aire muy similar, he vivido muchos años en la calle Francisco de Quevedo y tenía muy cerca la Antigua Estación de Utrillas y los edificios eran muy semejantes.


Antigua Estación de Trenes del Arrabal. Acuarela de 41 x 31 cms. sobre papel Arches de 300 grs.




Tienen los esdificios industriales del siglo pasado unas características constructivas más que dignas y en algunos casos es una pena que se pierdan incluso del recuerdo colectivo.

sábado, 6 de mayo de 2017

Cádiz, primera aproximación.

"Cádiz, en tus salubres aires
curan sus cuitas los dioses."

      Cádiz no sé si es un descubrimiento o un deslumbramiento. Estuve a finales del año 2016 con Avelina y unos amigos, evidentemente pensé, tendré que intentar pintar sus colores. Para esta cuarela partí de una fotografía que colgó mi amiga Dios en Facebook, no os extrañéis de eso de "mi amiga Dios" todo el mundo sabe, que si Dios existe, cosa discutible, será mujer o no será. Prometo, en todo caso, hacer esta misma marina en mayor tamaño y espero que mejor; habrá sido pues este intento una especie de boceto, de ahí el título: Cádiz, primera aproximación. Por otra parte es también mi primer intento con el mar que constituye uno de los motivos clásicos de las acuarelas.


Primera aproximación a Cádiz. Marina de 57 x 31 cms. Acuarela sobre papel Arches de 600 grs.

miércoles, 5 de abril de 2017

Otra vez Fortanete

   Como ya he escrito en este blog, más de una vez, el Maestrazgo es uno de mis sitios favoritos. Me gusta pasear, fotografiar y después pintarlo. Fortanete y su puente son una de mis debilidades. Al comienzo de mi interés por el dibujo y la pintura, con muy pocos medios y con resultados bastante mediocres hice una primera aproximación al puente. El formato era pequeñito, mitad de folio, y estaba dibujado con estilográfica y luego coloreado con acuarelas escolares. Aquí la cuelgo, no sin algo de pudor.



Dibujo coloreado de Fortanete.



   Ahora con más medios he vuelto a pintarla en mejor papel, con mejor pintura y creo que con mejores resultados.

Fortanete. Acuarela sobre papel Arches  61 x 46 cms

lunes, 27 de marzo de 2017

La Torre de Fresno de la Valduerna.

     Sigo pintando a partir de las fotografías que este verano pasado hicimos en nuestras vacaciones en Herreros de Jamúz. Este año, 1916, hemos visitamos muchas poblaciones de los alrededores del pueblo de Avelina porque vinieron unos amigos, María Luisa y Juanjo a pasar unos días con nosotros y como consecuencia recorrimos todas las rutas que nos propusieron en Información y turismo de La Bañeza. Todavía quiero pintar muchas más cosas.
Me atraen profundamente la luz, los colores y el paisaje leonés. Aquí dejo una acuarela que muestra la vista desde el Santuario de la Virgen de Castrotierra mirando hacia la Torre de Fresno de la Valduerna, hasta los nombres tienen sabor, el valle del río Duerna. En otra entrada de este blog, Herreros de Jamúz, he puesto unas cuantas acuarelas más.

Vista de la Torre de Fresno de la Valduerna desde el Santuario de Castrotierra. Acuarela de 61 x 46 cms en papel Arches. marzo de 2017.




Desayuno en la hierba, corral de Used (Zaragoza)


                                    En el corral
                                    piar de pájaros
                                    y el viento contra las hojas.
                                    J.V.M.

   Versión de un clásico, el desayuno en la hierba. Mutatis mutandis.
Tengo, claro está, limitaciones como acuarelista artesano pero me apetece pintar escenas como ésta. Es una escena cotidiana, doméstica: mi hija, Nuria, y mi yerno, José, en un momento tranquilo. Nuria leyendo en el ebook y José meditando o simplemente descansando. Luz y sombra en el antiguo corral ahora más o menos jardín, seguro que había un fondo musical de pájaros.
   No estoy completamente satisfecho pero tampoco es deplorable el resultado. 

Desayuno en el corral de Used. Acuarela de 61 x 41 cms. en papel Arches. Marzo de 2017.

Mi ahijado Mateo





   Mejorará, con toda seguridad, el retrato respecto a este boceto pero me he divertido pintando la acuarela sobre papel mojado. Esa técnica todavía se me resiste porque la he trabajado poco pero todo se andará. Me ha gustado dedicarle unas horas a mi ahijado Mateo, se lo merece, es una formidable peresona.
 También he hecho algunas intentonas con marinas y espero ir pillando la forma de trabajarlas. 

Boceto para un retrato de Mateo. Acuarela sobre papel Fabriano DINA 4

domingo, 26 de febrero de 2017

El Pilar desde el Puente de Piedra.

   Hay imágenes de las ciudades que resultan emblemáticas y por eso mismo huimos de ellas. Sin embargo en esta ocasión me entraron ganas de enfrentarme con una imagen archiconocida de la ciudad y ver qué salía. Siempre se pueden hacer estudios de la luz sobre los edificios, etc. Aquí está el resultado.

El Pilar y el Ebro desde el Puente de Piedra. Acuarela sobre papel Arches de 46 x 62 cms.

miércoles, 15 de febrero de 2017

Martín



    Me gustaría hacerles retratos a los nietos y poco a poco lo haré, espero. Empecé con un dibujo coloreado de León y ahora me he atrevido con Martín. 
   Ya se sabe que en los retratos siempre tienes sobre la cabeza la espada de Damocles de los parecidos, lógico pues que uno actúe con mucha calma. Fue gracioso el asunto del fondo de la acuarela, en la foto de la que partía había algo de color granate y que me parecía la silueta de un coche, pensándolo, después de haberlo esbozado, me di cuenta de que era imposible era el jardín y tenía que ser la caseta de las herramientas; así que con paciencia pude rectificar. No siempre es posible en acuarela pero en este caso lo pude hacer.
 Espero ir mejorando la técnica pero he quedado bastante satisfecho del resultado, en estos momentos, soy un aprendiz de primer año, es lo que sé hacer. Espero que le guste a él.

1. Va surgiendo poco a poco
2. Poco a poco se van definiendo los colores



3. Martín, retrato a la acuarela sobre papel Arches de 36 x 51 cms.

Patio de naranjos del Real Monasterio de Guadalupe



                                                               Naranjos del Monasterio de Guadalupe,
                                           sombra en el patio.

   Cuando estás de viaje una de las cosas que más agradeces es poder descansar en un sitio que transmita calma, y si el viaje es en verano también que el sitio sea fresco y silencioso. Eso nos ocurrió, hace ya unos siete años, cuando Avelina y yo hicimos un precioso viaje en mayo por Andalucía y Extremadura. 
   La vida de turista es muy cansada, aunque compensa conocer nuevos sitios, ciudades y paisajes. Fue para nosotros un momento de paz el patio de naranjos y limoneros del Parador de Guadalupe en Cáceres. Tenía además de sombra y rumor del agua de la fuente unos pajarillos que con su piar hacían el lugar totalmente apetecible y relajante. Hace unos días volví a ver las fotografías buscando alguna que me apeteciese como sujeto de una acuarela y claro seleccione ésta.


Patio de naranjos y limoneros del Parador de Guadalupe. Extremadura. Acuarela sobre papel Hahnemuhle 36 x 48 cms.


lunes, 30 de enero de 2017

Toulouse y los puentes

                                                                         
                                                                              Cuando las orillas son opuestas
                                                    los puentes sólo separan.
                                                                               J. V. M

   Confieso, sin rubor, que siento debilidad por los puentes. Como protagonistas plásticos de las acuarelas son elegantes en su afán de unir elementos muy diferentes: agua, tierra, vegetación, aire. Cicatrizan la herida producida en la tierra por el cuchillo del agua. Estéticamente son muy plásticos, sus volúmenes combinan  los vanos con los macizos, las piedras o el hierro se integran o armonizan con el paisaje urbano o con los elementos de la naturaleza. El último que he pintado, esta semana pasada,  ha sido le Pont-Neuf de Toulouse. 


Pont Neuf de Toulouse. Acuarela sobre papel Arches  de 31 x 41 cms.
  Visito de vez en cuando Toulouse para ver a mis amigos y ahijados. Cuando podemos visitamos la ciudad con buenos cicerones y reconocemos siempre en Toulouse una ciudad colorista, acogedora y quizás la ciudad francesa más cercana a nuestra forma de ser.  Ladrillos, tejas y colores hacen de Toulouse una ciudad rosada y con reminiscencias islámicas, es lo que he intentado reflejar en esta acuarela.
                                
                                   Los ojos de Toulousse
                                   miran el agua
                                   desde el puente nuevo.